Dame la vuelta
como si fuera un guante y verás
de qué están hechas
mis costuras
Comprueba la longitud de mis dedos
los hilos entretejidos
que forman mi cuerpo
¿No es el calor
que siempre has querido?
Colócame en tu mano y sentirás
Como mis miembros de lana
se ajustan a tu piel, reconfortada
como si estuviera cosida con hilo a tu palma
Pero recuerda, no me pierdas,
no me rompas, no me olvides
y si lo haces, yo te maldigo, porque el
invierno
llegará de todas formas
y no encontrarás abrigo
Y te juro que el frío
vendrá a comer de tu mano
y la cubrirá de migas de escarcha y desengaño
M.S.